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Realizamos plan de evaluación para uno de los programas del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia

El plan está enfocado en la mejora de la institución, encargada de garantizar la protección especializada de niños, niñas y adolescentes.

Generar un plan de sistema, monitoreo y evaluación que sea factible para el Programa de Diagnóstico Clínico Especializado (DCE) del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, es el objetivo principal de la evaluación que realizó nuestro Centro de Sistemas Públicos (CSP). Para esto, se diseñó una propuesta de plan de monitoreo y evaluación para el DCE a corto, mediano y largo plazo, donde se consideraron los tipos de evaluaciones pertinentes, sus componentes, atributos y temporalidad.

El plan fue generado evaluando la factibilidad y pertinencia acorde a sus características, con el fin de contar con un diseño estratégico de evaluaciones y mecanismos de monitoreo y seguimiento para la totalidad de los programas de protección especializada del Servicio, contribuyendo a la mejora continua de la institución, su eficiencia, eficacia y creación de valor público.

“Dentro del proyecto se revisó la literatura especializada y la experiencia internacional en materia de protección, se realizó un análisis del componente de diagnóstico a nivel de procesos, elementos y fortalezas. Finalmente se diseñaron recomendaciones en conjunto con indicadores y dimensiones para el plan de monitoreo y evaluación”, indicó Tomás Alegría, coordinador e ingeniero de proyectos del Centro de Sistemas Públicos.

La propuesta del plan para la institución, encargada de garantizar la protección especializada de niños, niñas y adolescentes gravemente amenazados y/o vulnerados en sus derechos, incluye dos niveles de monitoreo y evaluación: el sujeto y la gobernanza; y tres temporalidades: ex ante, ex dure, y ex post. 

En la evaluación ex ante, se consideran los marcos normativos y de política pública, el mapa de actores participantes, estándares mínimos y mecanismos de supervisión y de participación. Para la evaluación ex dure, se propusieron indicadores de procesos desde la gobernanza e indicadores de procesos y resultados desde el sujeto, con el objetivo de realizar visualizaciones de la información, elementos que son relevantes para conocer si las actividades implementadas se corresponden con lo establecido a nivel de diseño e implementación. En tanto, el enfoque de la evaluación ex post se centra en los resultados en la gobernanza y de impacto en el caso del sujeto.

“Estos programas establecen de modo declarativo cuáles son los principios que los guían, que muchas veces no se traducen en acciones concretas. Entonces, de alguna manera, al posicionarnos en estos enfoques, hicimos recomendaciones, establecimos indicadores en esa línea y eso también lleva al programa a cumplir con esos indicadores y, de alguna manera, el programa pueda implementarse desde un enfoque de derechos”, añadió Daniela Quezada, ayudante de investigación del proyecto.

De esta manera, el monitoreo y evaluación establece cuáles serán los parámetros por los cuales se van a evaluar y a retroalimentar los programas, influyendo, así, en  el diseño, los tipos de resultados que se consideran, entre otros. “En ese sentido, en el caso particular de este proyecto, ayuda a que este programa sea pensado desde un enfoque de derechos. Para mí eso es muy relevante y ese es el valor público que está detrás de este proyecto”, finalizó Quezada.

 

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30 de octubre de 2023