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La modernización del Estado sigue con una pata coja

Alejandro Barros


Hace ya unos meses se presentó el documento definitivo del Consorcio para la Reforma del Estado, Un Mejor Estado para Chile. En enero de este año con presencia de representantes del Consorcio, autoridades del Sector Público y la Academia (según me contaron). Lamenté no haber podido asistir, lo tenía muy presente, pero a la misma hora debía concurrir a los tribunales a declarar como testigo en un juicio que algunas empresas tecnológicas chilenas llevan en contra del gigante Google (más información sobre el caso, leer aquí).

Digo que lo lamenté mucho porque luego de escribir La modernización del Estado con una pata coja, lo cual me significó algunas conversas con destacados miembros de dicho consorcio como: Mario Waissbluth, Marcos Lima y Claudio Seebach, respecto de mi postura. En el caso de Claudio (Secretario Ejecutivo del Consorcio y actual encargado de la Unidad de Cumplimiento o denominada Delivery Unit, dependiente de la SEGPRES), incluso nos reunimos para conversar los temas por un buen rato, espacio que agradezco.

Nuestra conversación versó sobre los temas de modernización del estado y su vínculos con las tecnologías de información, lo que generó ciertas expectativas por mi parte, por ejemplo que se aceptaran algunas de las críticas que hiciera en su momento, respecto del la poca relevancia que el Consorcio para la Reforma del Estado diera a las tecnologías de información y su rol en la modernización del Estado. Pero creo fui ingenuo al pensar que se iba a modificar un texto trabajado durante muchos meses y que su redacción final hasta donde sé no fue fácil, sólo por que este computín hiciera algunos reclamos destemplados.

Estoy seguro que las propuestas planteadas apuntan a un mejor estado y aplaudo la capacidad para llegar a generar propuestas de consenso, sobretodo en un grupo tan diverso.

Pero lo que aún me parece difícil de creer es que en un documento de casi 800 páginas, 5 capítulos, 19 áreas temáticas cubiertas, entre las que podemos mencionar, recursos humanos, estructura del Estado, rol de las subsecretarías, planificación y presupuesto y gestión de calidad de políticas públicas entre otros, no este presente el rol de las tecnología de información en la modernización planteada.

Que en todos esos ámbitos no se haya relevado la importancia de las tecnologías de información en el desarrollo de un estado moderno me sorprende. Cuando digo las importancia me refiero a algo más que una nota al margen o al pie de página, por lo que pude leer del documento algunas referencias menores al tema, por ejemplo: gestión presupuestaria – página 571 y sistema de control estratégico – página 605 transparencia – página 643.

Esto no se resuelve con declaraciones de buena crianza como las tecnologías de información son una herramienta clave y transversal para la modernización del Estado como he escuchado en diversas ocasiones.

Los países más avanzados en esto de reformular el Estado, han entendido que las tecnologías de información son pieza fundamental y deben formar parte de las herramientas centrales para el rediseño, sobre todo por el rol que están tomando dichas herramientas y el surgimiento de conceptos tales como Open Gov, en el diseño y ejecución de las políticas públicas del siglo XXI.

Así lo han entendido ingleses, en el año 2005, en octubre para ser exacto desarrollaron un documento denominado Transformational Government: Enabled by Technology – Cabinet Office, November 2005, en el cual se señala como las TI son el elemento central para la transformación del Estado, Por su parte los norteamericanos definieron un rol de CIO y CTO el cual debe velar por el uso profundo de la TI en la modernización del Estado.

Otro gran ejemplo de esto, es el trabajo desarrollado por australianos, quienes establecieron una fuerza de tarea de 15 personas para diseñar las bases de un gobierno 2.0, denominada government 2.0 – taskforce. En su informe Engage_-_Getting_on_with_Government_2.0 establecen claramente un modelo de relación entre las Tecnologías de Información y los nuevos paradigmas de la gestión pública. Los puntos claves de su informe, que les transcribo en foma literal son:

* Government 2.0 or the use of the new collaborative tools and approaches of web 2.0 offers an unprecedented opportunity to achieve more open, accountable, responsive and efficient government.

* Though it involves new technology, Government 2.0 is really about a new approach to organising and governing. It will draw people into a closer and more collaborative relationship with their government. Australia has an opportunity to resume its leadership in seizing these opportunities and capturing the resulting social and economic benefits.

* Leadership, and policy and governance changes are needed to shift public sector culture and practice to make government information more accessible and usable, make government more consultative, participatory and transparent, build a culture of online innovation within Government, and to promote collaboration across agencies.

* Government pervades some of the most important aspects of our lives. Government 2.0 can harness the wealth of local and expert knowledge, ideas and enthusiasm of Australians to improve schools, hospitals, workplaces, to enrich our democracy and to improve its own policies, regulation and service delivery.

* Government 2.0 is a key means for renewing the public sector; offering new tools for public servants to engage and respond to the community; empower the enthusiastic, share ideas and further develop their expertise through networks of knowledge with fellow professionals and others. Together, public servants and interested communities can work to address complex policy and service delivery challenges.

* Information collected by or for the public sector — is a national resource which should be managed for public purposes. That means that we should reverse the current presumption that it is secret unless there are good reasons for release and presume instead that it should be freely available for anyone to use and transform unless there are compelling privacy, confidentially or security considerations.

* Government 2.0 will not be easy for it directly challenges some aspects of established policy and practice within government. Yet the changes to culture, practice and policy we envisage will ultimately advance the traditions of modern democratic government. hence, there is a requirement for co-ordinated leadership, policy and culture change.

* Government 2.0 is central to the delivery of government reforms like promoting innovation; and making our public service the world’s best

Al adoptar este tipo de prácticas de gobierno 2.0 se logra según el mismo estudio:

* una democracia más participativa e informada
* mejorar la calidad y respuesta de servicios en áreas claves como salud, educación y medio ambiente
* involucrar a los ciudadanos en el quehacer del estado
* desbloquear el inmenso valor económico de la información en manos del Estado
* revitalizar los servicios y políticas públicas respondiendo de mejor forma a los requerimientos del ciudadano.

Si el gobierno australiano (y otros gobiernos) como parte de su proceso de modernización del estado establecen un equipo de trabajo y proponen acciones concretas (en el informe vienen proyectos específicos) en el rol de las tecnologías de información al interior del estado y que estas no son sólo una herramienta más debe hacernos reflexionar o será que nosotros sabemos algo que ellos no saben.

Nosotros hemos relegado las TI a un segundo plano y mientras nuestros expertos no le asignen el rol y sitial que estas tienen, creo que tendremos que esperar por un tiempo para lograr un Estado 2.0, al menos como lo conceptualizan australianos, ingleses y norteamericanos.

www.alejandrobarros.com