Que el Registro Civil no está dando el ancho lo sabemos desde hace tiempo. Un amigo me contó una historia de lo que le acaba de ocurrir, es una joyita de burocracia inútil y cara. Me hizo recordar un post que escribí hace ya algún tiempo, de una experiencia en Bélgica, la cual buscaba descubrir los procesos con características kafkianos en el Estado.

A mi amigo, se le murió una tía de 90 años, que era viuda y sin hijos. Sus dos hermanos, que son sus herederos, iniciaron el trámite de Posesión Efectiva en el Registro Civil, para ello, listaron sus bienes, que no eran muchos, pero que su venta los iba a ayudar económicamente que ya tienen cerca de 80 años.

En el proceso de posesión efectiva, el Registro Civil pidió que se certificara la muerte (certificado de defunción en original) de los dos padres de la tía, ya que al no tener hijos eran sus herederos forzosos. Las dos primeras preguntas:

¿No es evidente que si una persona muere a los 90 años, sus padres tienen que estar muertos? 

¿Porqué el Registro Civil le pide al que tramita una posesión efectiva que certifique algo que ellos mismos validan?

 Pero esto recién comienza.

La madre de la tía falleció en los años 90, por lo tanto obtener el certificado de defunción fue fácil, y en línea. Pero, el problema era el padre, que falleció en los años 50. El Registro Civil no tiene en línea los fallecidos antes de cierta fecha.

Ahí partió un proceso absurdo y burocrático.

1. Fue a la oficina central a averiguar qué se hacía. Le indicaron que tenía que ir con el nombre y la fecha de fallecimiento a la oficina de Huérfanos, sección Registro Histórico a buscar el registro de fallecimiento.
2. En Registro Histórico, le dijeron que tenía que ir a la sección Índices. En índices, le pidieron el año y el lugar donde había fallecido, y le pasaron un libro para que buscara el mismo en el registro. En el libro que le pasaron no estaba registrado. Le dijeron que no había más que ir al cementerio a pedir el pase de sepultación.
3. Fue al cementerio donde estaba enterrado y nuevamente tuvo que buscar los fallecidos en los libros del año de fallecimiento. Afortunadamente ahí estaba, y le entregaron un ‘Certificado Informe Registro Civil’, donde aparece el nombre, año de fallecimiento, la circunscripción y el número de inscripción. Alivio, al menos había un papel timbrado con datos que le indicaba que una persona que obviamente estaba muerta (por lógica), efectivamente estaba muerta. Tercera pregunta: ¿qué pasa si el libro se pierde o se quema?. La respuesta del funcionario del cementerio, era que no había problemas ya que los Mormones habían sacado microfichas de todos los libros así que ellos tenían una copia.
4. Volvió al registro civil de Huérfanos a la sección Índice. Ahí verificaron el certificado del cementerio, y le indicaron que hiciera la fila 2 para obtener el Certificado de Defunción. Después de 50 minutos de fila de espera lo atendieron. Entregó el certificado, la funcionaria buscó en el sistema, y apareció hasta el RUN del señor. El comentario fue: al menos tiene RUN, ya que si no, habría que haber el hecho el trámite de asignación de RUN. Pero, no fue posible emitir el certificado, porque había que ingresarlo al sistema, y se emitió una “Petición de Ingreso de Partida”. El certificado estará entre 15 a 20 días hábiles más. Por lo tanto la posesión efectiva, la inscripción de los bienes deberán seguir esperando a ese certificado.

Cuarta y quinta pregunta.

¿Porqué no buscaron por el nombre y año de fallecimiento en las bases del sistema si ya estaba incluso con RUN asignado?.

¿Porqué demora 15 a 20 días hábiles certificar que un señor está fallecido si así lo registra el cementerio y también el registro civil?.

Da pena lo que ocurre, un servicio que fue pionero en atención en línea, en buen y eficiente servicio ya no está cumpliendo su rol. En el edificio de Huérfanos diversas filas para distintos certificados, pocos funcionarios atendiendo. Letreros de los funcionarios diciendo que no los traten mal, ya que las deficiencias no eran culpa de ellos sino de los jefes. Y estos procesos burocráticos inútiles.

 

Después de leer esto también recordé la fábula de los Cerdos Asados?

 

Imagen: Dósis Diarias – Alberto Montt

«¿Qué tan exitosos son los Estados?